Video | Reiki, una técnica milenaria
por Emilia Bazán, Master Reiki
Master Reiki Emilia Bazán
La imposición de manos cerca del cuerpo de otra persona con fines curativos ha sido una acción desarrollada a lo largo de toda nuestra historia. El japonés Mikao Usui, a principios del 1900, fue quien le dio estructura y recopiló todos los datos sobre esta terapia.
Todos podemos hacer Reiki, muchos dicen que pertenece a toda la humanidad, que lo portamos en nuestro ADN, explica Emilia Bazán, reflexóloga y profesora de Reiki los sábados en Sierra de los Padres.
Esta terapia está dirigida hacia el campo magnético de las personas, donde confluyen las distintas corrientes energéticas que configuran el aura. Al actuar sobre la misma, se pueden generar fenómenos de sanación.
Aura y chakras
Nos abocamos a restaurar ese campo magnético cuando está interrumpido por algo. Nosotros decimos:‘tenés una deficiencia pránica, tenés una fuga energética en el aura’. En ese sentido, vamos a reparar a través de la imposición de manos ese lugar que está dañado, cuenta Emilia.
Como consecuencia, se desbloquean los canales de circulación energética, y los órganos y glándulas del sector del cuerpo afectado comienzan a funcionar mejor.
El reiki opera sobre siete capas distintas, cada una relacionada a un determinado centro superior de energía: los chakras. La acción sobre cada uno facilita el proceso de curación de una persona, tanto física como emocional.
Esta técnica no está reservada para unos pocos, sino que, quien se lo proponga, puede realizarla.
Existen tres niveles de aprendizaje:
En el primero,la persona puede hacer su propia autosanación.
Aquí,aprendemos a tomar parte del potencial del universo, de conectarnos con el sol…Esa energía, que no nos pertenece, ingresa y la podemos transmitir a nosotros mismos, describe Emilia.
Emilia Bazán
En el segundo, la persona ya tiene un compromiso terapéutico, por lo que se aprende a sanar a otras personas.
Y por último, el tercero es la maestría: se desarrolla la capacidad de enseñar.
La posibilidad de sanar energías propias o ajenas, se siente.
Tan sólo basta con acercar la palma de nuestras manos a nuestro cuerpo, o al de otra persona, y sentir el calor del aura.
Click abajo para ver el video con la exposición completa de la Master reiki Emilia Bazán:
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