No hay vacuna para el mal.
Dice el axioma que todo brujo, tarde o temprano, muere ahorcado por el diablo. Según las antiguas doctrinas el mal se auto-regula. Lucifer nunca ganará la batalla contra las huestes de Miguel, porque a diferencia del bien, no existe una “solidaridad del mal”. Los malos buscan salvarse a sí mismos. Los buenos intentan que la…